¿Cómo conseguir un alisado definitivo?
El alisado permanente es totalmente aconsejable para personas con cabello encrespado, demasiado voluminoso, o rebelde. Así como para aquellas personas que teniendo el cabello rizado se lo alisan a diario por estética o comodidad, lo que puede suponer una inversión demasiado grande de tiempo, pudiendo solucionarse mediante el alisado definitivo. A continuación se exponen dos de las técnicas a las que optar para poder disfrutar del mismo.
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Alisado definitivo con Queratina
El Alisado definitivo mediante queratina puede ser una buena solución al cabello voluminoso o que se encrespa fácilmente. No obstante no es recomendable acudir a él si se tiene un cabello muy rizado, ya que no alisa el cabello completamente.
Este tipo de alisado tiene una duración aproximada de 3 meses y se encuentra entre los 100€ y los 200€ aproximadamente (a 15 de junio de 2011) dependiendo éste precio tanto de la longitud del cabello como de la tipología del mismo.
El procedimiento habitual del alisado mediante queratina consiste en:
1. El lavado en profundidad del cabello.
2. La aplicación de la queratina por mechones, al igual que en la aplicación de un tinte.
3. El alisado del cabello con el producto aplicado, primeramente con un secador y posteriormente con una plancha.
4. Un tiempo de espera específico para que el producto actúe.
5. Un segundo lavado del cabello.
6. Y una última aplicación de otros productos como cremas que tienen por finalidad fijar la queratina.
Una vez realizado todo el procedimiento, el cabello ya estará liso y por lo tanto no será necesario alisarlo, tan sólo secarlo con un secador normal o al aire libre.
Alisado definitivo Japonés
El alisado definitivo japonés es aconsejable para cualquier tipo de cabello, ya que permite alisar completamente incluso los cabellos más rizados o rebeldes.
No obstante el precio de este alisado es bastante más caro, pudiendo encontrar tarifas del mismo desde los 300€ como mínimo aproximadamente (a 15 de junio de 2011).
El procedimiento del alisado japonés puede variar. Aún así, éstos son los pasos básicos:
1. Lavado completo del cabello.
2. Aplicación de una "solución reductora".
3. Aclarado.
4. Aplicación de un producto de protección térmica y posterior planchado del cabello.
5. Aplicación de una "solución neutralizante".
6. Aclarado y secado final.
Tras el procedimiento el cabello estará completamente liso y no se tendrá la necesidad de alisarlo durante, como mínimo, los 6 meses siguientes.