¿Cómo debe ser la mejor dieta de adelgazamiento?
Antes de comenzar un tratamiento para bajar de peso, se debe realizar una consulta médica para evaluar el estado de salud. Si existen enfermedades como colesterol alto, hipertensión arterial, enfermedades cardíacas, problemas renales o hepáticos, trastornos digestivos o intolerancia a determinados alimentos, deben ser tenidos en cuenta al momento de determinar la dieta.
Apoyo profesional
Luego del control médico, el profesional idóneo para fijar una dieta personalizada es el nutricionista. Él tiene en cuenta no solamente los problemas de salud del paciente sino también sus hábitos alimenticios y preferencias, para determinar un régimen para adelgazar adecuado y efectivo. No sólo indica el tipo de dieta a realizar sino que brinda consejos para bajar de peso, realiza una evaluación de los progresos obtenidos y ajusta la dieta de acuerdo a los resultados, en los controles siguientes.
La dieta natural
Para perder kilos de forma saludable y segura es mejor seguir un régimen para adelgazar con una dieta sana. Es la más indicada para todo tipo de pacientes, y tiene las siguientes recomendaciones. No se debe consumir azúcar, sal, grasas, harinas, embutidos, gaseosas ni bebidas alcohólicas. Hay que reducir el consumo de carne roja y sustituirla por pollo sin piel o pescado, hervido, asado o al horno. Deben evitarse todas las frituras, los alimentos enlatados con alto contenido de aceite o sodio y los postres, las golosinas y los dulces. La dieta para bajar de peso en forma natural se basa en el consumo de alimentos frescos, consistentes en cinco porciones diarias de frutas y verduras, con preferencia vegetales. Se exceptúan las uvas, bananas, higos, choclo, papas y boniato. Ensaladas, caldos de verduras, carnes magras, condimentos vegetales como orégano, ajo, pimienta y perejil, queso magro, leche descremada, frutas crudas o cocidas, edulcorante en lugar de azúcar, yogurt y gelatina dietética son los alimentos permitidos. Se deben realizar seis ingestas al día, para activar el metabolismo y evitar los ataques de hambre. No se deben saltear comidas, realizar ayunos ni comer entre comidas. Deben ingerirse abundantes líquidos, preferentemente dos litros diarios, incluyendo agua, infusiones con edulcorante, té o café sin azúcar, jugos de frutas frescas o dietéticas y, en menor proporción, gaseosas dietéticas. Evite las dietas que prometen adelgazar rápidamente. Pueden provocarle descompensaciones nutricionales y sus resultados no son permanentes. Los batidos para adelgazar que se comercializan para sustituir comidas contienen vitaminas y minerales, pero cuando se suspende su ingesta pueden recuperarse algunos kilos. Es preferible preparar los propios batidos con frutas y vegetales naturales. Realice ejercicio físico en forma regular o incluya una caminata diaria de 30 minutos como mínimo para complementar la dieta y bajar de peso.