¿Cómo se efectúa el levantamiento de una hipoteca? Pasos por el experto
No basta con la cancelación de un préstamo hipotecario para que el inmueble quede liberado, deben hacerse una serie de trámites ante el acreedor y la oficina de registro correspondiente. Por ello es importante saber exactamente cómo levantar una hipoteca y sus pasos, como si de un experto en la materia se tratase.
Por qué es importante
Para que exista la hipoteca no basta que el banco haya entregado el dinero, sino que el documento que contiene el contrato debe registrarse o de lo contrario dicha garantía carecerá de validez.
En forma simétrica, para poner fin a la hipoteca no es suficiente con que se haya cancelado la deuda, debe haber una declaración expresa del prestamista, que a su vez requiere ser registrada.
Sin esta cancelación registral, no será posible que alguien acepte comprar el bien, y dificultará crear nuevas cargas sobre el mismo.
Cómo hacerla
Hay ciertos pasos para cancelar una hipoteca, que se explican a continuación. Cuando se haya terminado de amortizar un préstamo hipotecario, se debe solicitar una carta de pago de la hipoteca al banco, y llevarla al notario para que prepare con ella el documento de cancelación hipotecaria, que debe firmar el representante del acreedor.
Una vez otorgada esta escritura, se lleva al registro de la propiedada correspondiente, ya sea directamente o a través de una gestoría. Todo ello tiene cierto coste, en términos básicamente de tasas que cobra el notario y el registro, que rondan entre los 300 y los 900 euros, dependiendo de varios parámetros (cálculos al 22 de agosto de 2011).
Este trámite no se debe ir aplazando, pues en algunos casos puede tomar hasta 6 meses. Por otro lado, si el banco tuviese algún percance (quiebra o intervención), el procedimiento pudiese complicarse y extenderse.
A su vez, si el acreedor fuese, por ejemplo, una persona física y esta fallece, habría que solicitar la liberación a sus herederos, lo que en algunos casos puede significar tener que intentar un juicio y prolongar la consecución del levantamiento de la hipoteca por un plazo mucho más extenso.
Conclusión
La cancelación de una hipoteca implica también su levantamiento ante el registro hipotecario para que surta todos sus efectos legales; aunque se trata de un trámite sencillo, no hacerlo conllevaría problemas en el futuro, por lo que no vale la pena diferir estas diligencias.