¿Qué cobertura básica incluye un seguro de decesos?
Un seguro de decesos, o como tradicionalmente se les conoce: “seguro de los muertos”, está enmarcado dentro de la rama vida/decesos, siendo una de las pólizas mas completas del mercado asegurador, en el que se incluyen cláusulas básicas y adicionales que asegurarán una perfecta cobertura, dependiendo siempre de la compañía aseguradora, los miembros que componen la unidad familiar y la localidad de residencia.
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Cláusulas básicas contratables
La póliza de decesos básicamente cubre los gastos del sepelio de los asegurados que figuran en el contrato, incluyendo el traslado al tanatorio o incineración y la gestión de trámites legales. Entre las cláusulas, en unos casos adicionales y en otros normales, se suele contratar un seguro de vida y de invalidez permanente con cuantías variables, además de traslados nacionales o internacionales. Los traslados nacionales e internacionales son una cobertura de traslado para familiares directos y el titular del seguro. Continuando con la póliza básica de decesos, siempre influirá en el precio final, el número de personas que conforman la póliza, la edad de los titulares, y la localidad, siendo el precio muy distinto en una gran ciudad que en un punto geográfico pequeño. La asistencia telefónica domiciliaria, es una condición optativa que solo funcionará durante un tiempo determinado.
Leer la letra pequeña del contrato
Generalmente, las grande compañías aseguradores ofrecen este tipo de producto con unas condiciones económicas flexibles, pudiendo hacer el pago de la prima de manera mensual, trimestral, semestral o anualmente. El seguro de decesos se calcula en base a los datos anteriormente expuestos, y sobre todo con el precio oficial marcado para un sepelio por las compañías funerarias, por lo que la cuantía anual sube un porcentaje, durante el periodo de vida útil de la póliza. Si el importe calculado, a la hora de un deceso, es superior al coste real, la compañía aseguradora está obligada a devolver el dinero sobrante al titular del contrato de decesos. Como ejemplo: Si un servicio completo de decesos, incluyendo tanatorio, traslado, corona de flores, y todos los servicios asociados, se calcula con un importe cercano a los 3.500 euros y la factura total fuera por parte de la compañía funeraria de 3.200, el resto se puede reclamar a la compañía aseguradora. Si este tipo de póliza se diera de baja después de un tiempo, no existe ningún tipo de rescate, compensación o derecho adquirido por el cliente, por lo que el contrato se rescindiría sin más.