Carlos Alberto: Biografía
Carlos Alberto, alias “El Capitán”, es considerado como uno de los mejores laterales derechos de todos los tiempos. Su gol en la final del mundial de México 70 con la selección de Brasil es recordado como uno de los más bellos que se hayan anotado en las Copas del Mundo.
Sus inicios en el fútbol
Carlos Alberto Torres nació en 1994 en Río de Janeiro, Brasil. Su carrera como futbolista la inició en el Club Fluminense, debutando en la primera división de su país en 1963. Destacó de inmediato debido a su potencia física, su inmejorable técnica individual y su talento para ir al frente, características muy difíciles de encontrar en los defensores de esos tiempos.
Su paso por Brasil y los Estados Unidos
Carlos Alberto fue jugador de los tres equipos más grandes de Río de Janeiro. Jugó en el Fluminense de 1963 a 1965 y una temporada más en 1976, consiguiendo dos Campeonatos Cariocas con este club. En el Botafogo participó en la temporada 1971- 1972 y finalmente vistió la camiseta del Flamengo por un periodo corto de tiempo en 1977. También jugó en el club más famoso de Brasil de aquella época: el Santos Futebol Clube. Su llegada a este equipo se dio en 1965, donde jugó cinco temporadas antes de salir al Botafogo, pero regresó un año después para quedarse hasta 1975. En 1977, el Cosmos de Nueva York, equipo de la North America Soccer League (NASL), fichó a Carlos Alberto como su refuerzo de lujo, llegando el jugador brasileño como una verdadera figura a la liga estadounidense y convirtiéndose de inmediato en un atractivo más para esta escuadra, que ya contaba en sus filas con el “Rey” Pelé. Carlos Alberto “El Capitán”, se retiró jugando para el Cosmos de Nueva York en 1982 para inciar su carrera como director técnico, pero su destacada participación con este club lo llevó a ser nombrado miembro del Salón de la Fama del Fútbol en los Estados Unidos en 2003.
La selección brasileña
Carlos Alberto es considerado como el mejor lateral derecho brasileño de todos los tiempos. Su imagen más recordada es anotando el cuarto gol en la final del Mundial de México 70 ante Italia, en una de las jugadas más emblemáticas de las Copas del Mundo. Su figura y personalidad lo pusieron como uno de los referentes de la selección “verdeamarela” y hasta el momento, no ha surgido un futbolista brasileño con su magia y su talento para atacar y su maestría para defender, por lo que Carlos Alberto seguirá siendo recordado como uno de los grandes del fútbol mundial.