Grecia: Mykonos, una isla con mucho encanto

Mykonos es una de las islas griegas más conocidas y con más encanto: sus casitas blancas, sus rincones, sus impresionantes playas y una intensa vida nocturna hacen de la isla uno de los destinos más interesantes entre las islas griegas.

¿Cómo llegar y desplazarse en Mykonos?

Existen muchas posibilidades a la hora de acercarse a Mykonos. Una de las posibilidades preferidas por muchos turistas es hacer cruceros por las islas griegas, parando un día en cada una de ellas. Es una opción, aunque no permite estar demasiado tiempo en la isla, una pena, porque merece la pena pasear por sus calles y disfrutar de sus noches. Otra alternativa es viajar en avión hasta Atenas. Son muchas las compañías que tienen vuelos a la capital griega, e incluso hay vuelos baratos, con lo que el viaje puede salir muy bien de precio. Después de disfrutar de la capital, se puede tomar un ferry para llegar hasta la isla. Hay una gran cantidad de ferrys que recorren las islas griegas, con varios horarios, por lo que encontrar viajes a Mykonos en ferrys no es complicado. Otra posibilidad es coger un vuelo directo a la isla de Mykonos desde Barcelona, con la compañía Vueling. Una vez en la isla, la mejor alternativa es alquilar un coche, algo que se puede hacer desde el mismo aeropuerto, ya que la no se trata de una isla demasiado grande y la mejor manera de moverse, a no ser que se contraten excursiones con el hotel, es en un coche, que puede ser perfectamente pequeño.

¿Qué ver en Mykonos?

La isla de Mykonos destaca por sus calles estrechas y con recorridos laberínticos y sus casas blancas, en ocasiones, con los balcones llenos de flores. Se trata de una isla que merece ser recorrida a pie para poder contemplarla al detalle. Una visita casi obligada es la iglesia de la Santísima Virgen Paraportiani, pero para los amantes del arte y las iglesias, hay otras muchas que visitar: nada más y nada menos que unas 400 por toda la isla. El pelícano Petros (que pasea tranquilamente por la isla) y los molinos son dos de los símbolos de la isla que no se pueden dejar de ver. Además, merece la pena acercarse al barrio de Castro y por la noche, a la parte baja de la ciudad, que se ha convertido en una zona de copas con una gran animación. Otra de las cosas más recomendables, además de recorrer las pequeñas poblaciones de la isla para encontrar lugares con mucha historia y rincones preciosos, es tomar una de las barquitas que salen de la isla y que llevan a las playas más bonitas de Mykonos y a hacer excursiones a calas o, para los que quieran un viaje un poco más largo, a la cercana isla de Delos, sin duda, una visita muy recomendable. Por todo ello, Mykonos es un destino muy recomendable en las islas griegas, porque combina arte e historia, unas playas preciosas y una vida nocturna muy animada. ¿No se puede pedir más?