Medidor de presión digital o convencional ¿Cuál es la mejor opción?

El medidor de presión digital, de resultados más exactos y fiables, es la mejor opción para medir la presión de gases o líquidos.

Manómetro

El manómetro o medidor convencional de presión, es un aparato manual que sirve para medir la presión de espacios cerrados. Así, según la clase de manómetro, este servirá para medir la presión de líquidos o gases concentrados en un recipiente sellado. Para calcular estas medidas, la mayoría de ellos toma como referencia la presión atmosférica diferenciándola con la presión real o absoluta, denominándose al resultado obtenido presión manométrica. De este modo, se distinguen los siguientes tipos de medidores manuales de presión: - Manómetro truncado: Sirve para medir la presión gaseosa de pequeños recipientes.
- Manómetro metálico o aneroide: Se utilizan casi exclusivamente en el sector industrial, actuando dentro de la caja la presión que se desea calcular y fuera la presión atmosférica.
- Manómetro de dos ramas abiertas: Permite medir la presión del líquido incrustado en espacios cerrados.

Medidor de presión digital

En tanto, el manómetro digital es más exacto y rápido de usar, así, a través de un control por microprocesador dará la presión, tanto de líquidos como de gases, de forma altamente precisa y fiable. Cuenta con una carcasa protectora y una pantalla digital donde se mostrará los resultados del cálculo de presión efectuado. La calibración del aparato se realiza desde la misma fábrica del proveedor, teniendo que cumplir las normas y requisitos señalados por el certificado ISO. De este modo, los medidores digitales ofrecen ventajas frente a los convencionales, como las de poder seleccionar la unidad de medida, pantallas de LCD, medición de todo tipo de gases y líquidos no agresivos, indicación de sobrepresión, presión negativa o presión diferencial o un adaptador de tubos de acero noble.

¿Mejor opción?

De acuerdo con los visto, el medidor de presión digital parece la mejor opción. Con él, se podrá contar con un resultado más fiable y exacto, sumando además su rapidez de cómputo. Otra ventaja frente a los medidores comunes, es su carácter más robusto que permite ser utilizado en condiciones adversas y tener una mayor vida útil. En contra, su precio será más elevado que el de los medidores manuales.