¿Cómo hacer caricaturas a lápiz? primeros pasos
Hacer dibujos a lápiz puede parecer una tarea muy complicada y sólo al alcance de unos pocos elegidos, pero se puede hacer un buen dibujo sin muchas cualidades técnicas simplemente siguiendo un orden y planificando el dibujo que se pretende realizar antes de comenzar a dibujar. En el caso de las caricaturas, una herramienta de aprendizaje muy útil es la practicar buscando dibujos de ojos para pintar ya que estos definirán especialmente el gesto y la personalidad de la caricatura.
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Primer paso: la escala y las proporciones
Lo primero para empezar a dibujar es saber qué se va a dibujar. Para ello se puede utilizar un modelo al natural o recurrir a un dibujo impreso o que ya esté hecho a lápiz. Con diferencia, esta segunda opción es bastante más fácil, ya que para trasladar las sombras del modelo al papel hace falta un gran dominio de la técnica mientras que en el dibujo impreso estas sombras y los rasgos vienen ya marcados por el mismo lápiz. Otra opción es pasar una foto a lápiz con un editor de imágenes, que incluso suele ofrecer la posibilidad de añadir filtros para fotos y las edita automáticamente en el caso de tengan alguna imperfección como ojos rojos. En cuanto a las proporciones, un recurso muy utilizado es el de dibujar una guía o cuadrícula en el papel a lápiz suave, medir el dibujo original y pasarlo a escala a la cuadrícula. Cuando ya esté finalizado el dibujo bastará con borrar las líneas que hacen de guía para que el resultado quede más profesional.
Segundo paso: El tipo de lápiz
Lo más recomendable para dibujar bocetos es utilizar un tipo de lápiz blando, como un 2B, ya que son más fáciles de borrar y deslizan muy bien sobre el papel. Además, las caricaturas incluyen una gran cantidad de sombras, por lo que es necesario el uso de un lápiz graso que deje un rastro de grafito sobre el papel al deslizarlo. Otra recomendación es usar un difumino, que es un lápiz de cartón que se utiliza para degradar las zonas más oscuras del dibujo y conseguir que queden homogéneas, sin rastros de líneas ni otras marcas. Por último, queda hablar de los lápices duros, del tipo 2H. Estos lápices se utilizan para señalar líneas finas y precisas, como las pestañas o el detalle de los labios. El grafito de este lápiz no difumina, por lo que las líneas que realicemos con ellos permanecerán visibles.
Tercer paso: Cómo comenzar a dibujar
Una vez que está hecha la cuadrícula y se han medido las proporciones del dibujo, lo más recomendable para empezar es dibujar un círculo grande, que se corresponda con el tamaño y la forma de la cara. A continuación se divide la lámina aproximadamente por la mitad y se coloca una marca en el centro de la cara, sobre la que irán localizados los ojos. Después se divide la mitad inferior en otras dos mitades y se traza una marca por encima de la línea para la nariz, y otra por debajo de la línea para los labios. Por último, las orejas deben ir colocadas a la misma altura que los ojos. Al tratarse de una caricatura, se deben exagerar los rasgos más pronunciados para darle un toque cómico, por lo que las proporciones antes descritas no son estrictas, sino que pueden variar. Por último queda dibujar el cuerpo. Una clave importante a tener en cuenta es que debe estar desproporcionado en relación con la cabeza es decir, mucho más pequeño. No se debe olvidar añadir algún elemento relacionado con la persona dibujada, ya sea según sus aficiones, su carácter o su profesión.