¿Por qué aprender kung fu tradicional?
El Kung Fu es mucho más que un deporte que permite desarrollar determinadas habilidades del individuo. Es todo un arte, que requiere de trabajo, constancia y dedicación para poder comprenderlo y dominarlo cabalmente. En este artículo se abordarán algunos de los principales beneficios físicos, mentales y sociales que aporta este arte marcial milenario a quienes lo practican.
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Para el cuerpo
El Kung Fu es de origen chino y tiene más de dos mil años de tradición. Practicar este arte oriental brinda muchos beneficios al individuo en el plano físico-corporal: a) Fortalece la masa muscular. La práctica de cualquiera de los tipos de Kung Fu que se conocen, y especialmente el tradicional, contribuye a tonificar y fortalecer todos los músculos. b) Facilita el elongamiento. El Kung Fu dedica una buena parte de su tiempo al estiramiento del cuerpo. Con esto se logra una mayor flexibilidad de las articulaciones, y se evitan tirones o desgarros. c) Mejora la Capacidad aeróbica. La práctica de Kung Fu amplía el volumen de ventilación pulmonar, regulando la respiración. Ayuda a controlar la presión arterial, y favorece la actividad cardiovascular. d) Aumenta la densidad ósea. De esta manera disminuyen las probabilidades de sufrir fracturas. e) Mejora el equilibrio. Se advierten mejoras en aquellas personas con dificultades de coordinación.
Para la mente
a) Serenidad. La práctica del Kung Fu ayuda a contrarrestar el estrés. La concentración que se necesita para este ejercicio, aleja los pensamientos cotidianos y hace bajar los niveles de ansiedad . A su vez, los movimientos corporales permiten descargar todas las tensiones acumuladas. b) Seguridad. Las técnicas del Kung Fu son de utilidad para la defensa personal, por lo que quien las domine se sentirá más seguro frente a cualquier episodio de violencia. Esto también favorece el aumento de la autoestima, por lo que está muy indicado para personas tímidas y retraídas. c) Disciplina y metas. El Kung Fu enseña a quienes lo practican a alcanzar metas, a sobreponerse frente a los obstáculos y a ser perseverante. La disciplina, la constancia y el método de trabajo que están presentes en este arte se pueden luego proyectar a la vida cotidiana.
Para la vida social
a) Respeto. En el Kung Fu es fundamental la relación que mantienen maestro (shifu) y discípulo, la que está basada en dos pilares: confianza y respeto mutuos. b) Solidaridad. Dentro de la filosofía del Kung Fu, se destacan valores como la colaboración y la ayuda mutua. Es así, que los alumnos más antiguos deben siempre ayudar en el entrenamiento a los más nuevos. Este sentido de la camaradería y solidaridad se aplicará luego en la vida social de cada individuo. c) Paz interior. En este arte marcial, toda la energía y agresividad que lleva el individuo se canaliza a través del entrenamiento. Por esta razón, las personas que practican todos los pasos de Kung Fu suelen ser tranquilas y socialmente pacíficas.