¿Cómo bajar de peso rápidamente sin hacer dieta aprendiendo a comer bien?
Existe en la actualidad una gran cantidad de dietas para perder peso que prometen soluciones mágicas en pocas semanas. Algunas personas que sufren sobrepeso u obesidad, suelen sentir la necesidad de bajar lo antes posible sus kilos de más, sin evaluar que hábitos son los correctos para poder adelgazar sin dejar de alimentarse bien.
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Comer y adelgazar
Aquellas dietas que son extremadamente rigurosas en cuanto a la variedad y la cantidad de lo permitido, puede resultar muy efectivo para bajar rápidamente de peso, pero sus costos pueden ser altos. El efecto rebote es común cuando la persona llega a su peso ideal y retoma sus viejos hábitos desordenados, volviendo al sobrepeso inicial e inclusive a uno mayor. Tampoco aquellas dietas acompañadas de laxantes, diuréticos, anfetaminas y similares han demostrado ser exitosas a largo tiempo. Ellas pueden inclusive alterar el carácter y el estado anímico. Por eso es importante, bajar la ansiedad con el tema del tiempo que puede llevar lograr el peso ideal y armarse de paciencia para poder adelgazar, alimentándose bien y quedando satisfecho.
Nueva forma de alimentarse
Hace ya unos años ha surgido un nuevo concepto para bajar de peso y mantenerlo en el tiempo denominado "alimentación disociada". Su nombre hace referencia a "disociar" la comida en dos categorías: las compuestas por hidratos de carbono y aquellas que pertenecen a las proteínas. Esta forma de alimentación se basa en mantener una alimentación variada, sin poner límites en las cantidades, siempre y cuando se respete una premisa fundamental: no mezclar los hidratos de carbono con las proteínas. Ello se debe a que el proceso de digestión, absorción y eliminación es mucho mejor, reduciendo considerablemente la formación de grasas en el cuerpo. Otro punto importante es la distribución de la comida durante todo el día. No es cuestión de no comer o comer pocas veces al día, sino de comer pequeñas cantidades e ingerir infusiones, varias veces al día.
Menú diario
El desayuno o la merienda:
- Un zumo de naranja o pomelo (dejar pasar media hora).
- Ingerir una porción de queso o un yogur desnatado.
- Un café/té con leche.
El almuerzo:
- Una comida hiperglúcida: compuesta por el consumo a voluntad de pan, arroz, legumbres, pastas, farináceos, excluyendo totalmente aquellos que son hiperproteicos.
La cena:
- Lo contrario del almuerzo: una dieta hiperproteica que puede estar compuesta por: huevos, pescados, carnes, leche y quesos, estando prohibidos los hidratos de carbono.
Se recomienda mantener este orden y no al revés. Una cena hiperglucídica puede perjudicar la funcionalidad hepática y aumentar los valores de colesterol, como también dificultar el sueño nocturno y despertarse con molestias matutinas tales como cefalea, boca pastosa o mal aliento.
Lo que no puede mezclarse
La carne y el pescado nunca con el arroz, ni la leche ni la fruta. La pasta sólo se puede mezclar con verduras: champiñones, ajo, aceite y hierbas. El arroz sólo con verduras. Se permite una vez por semana, con pollo o paella. La fruta ácida con las dulces. Alimentos prohibidos: los fritos, el pan blanco (únicamente integral si es necesario), los frutos secos, las patatas, el cerdo, los azúcares, los plátanos, los higos y el alcohol. Ejemplos de platos permitidos y sabrosos: arroz con pollo, paella, espagueti con pisto, caldereta de cordero, pulpo a la gallega, acelgas rehogadas con jamón serrano, revuelto de calabacines, pescado a la plancha con verduras, entre otros. Estos consejos para perder peso ofrecen resultados satisfactorios, tanto para aquellos que deseen mantener su peso como para aquellos que han fracasado con otras dietas. Se puede lograr bajar alrededor de 3kg. al mes, dependerá también de cada organismo y exceso de kilos.