¿Para qué sirve un inversor de corriente?
La corriente eléctrica se ha convertido en algo indispensable en nuestro día a día, si nos fijamos estamos rodeados de multitud de aparatos eléctricos, en algunos de ellos es indispensable emplear un inversor de corriente para su correcto funcionamiento.
El Inversor de Corriente
Un inversor de corriente es un dispositivo electrónico cuya función es la de convertir una corriente continua (CC) de entrada a una corriente alterna (CA) de salida, obteniendo la magnitud y frecuencia que se desea para el dispositivo a alimentar. Gracias a estos dispositivos inversores es posible obtener corriente alterna partiendo de baterías, las cuales son de corriente continua para ejercer su función de acumular la energía. Los inversores se emplean en distintos tipos de aplicaciones, desde aplicaciones industriales como inversor de potencia hasta fuentes de alimentación para ordenadores. También son empleados para convertir la energía continua que proporcionan las placas solares en energía alterna y así poder ser inyectada directamente en la red eléctrica.
Tipos de Inversores
Un inversor básico está formado por un oscilador que controla una serie de transistores, dichos transistores se utilizan para provocar cortes en la corriente de entrada y generar una onda cuadrada.
La onda cuadrada alimenta un transformador, el cual suaviza la señal, le proporciona forma de onda senoidal y genera el voltaje de salida necesario.
La forma de onda de salida ideal es una onda senoidal perfecta, para lograr esto se emplean técnicas de modulación de pulsos PWM (Pulse Wide Modulation).
Los inversores más avanzados, en lugar de transistores emplean otros dispositivos más avanzados como son tiristores, los triacs o los IGBT (Insulated Gate Bipolar transistor), que proporcionan formas de onda más limpias.
Según la tensión que sean capaces de convertir, los convertidores más comunes son:
- 12 Voltios
- 24 voltios
- 48 voltios
Según el número de fases se puede encontrar inversores monofásicos y trifásicos:
- Monofásicos: Pensado para operar en circuitos de dos fases, como es la instalación eléctrica de una vivienda.
- Trifásicos: Diseñados para operar en líneas de tensión de tres fases, como son las instalaciones de transporte de energía eléctrica o instalaciones industriales.
Según la potencia:
- Baja potencia: Potencias inferiores a 2000W
- Alta potencia: Potencias superiores a 2000W