Paul Gauguin: Biografía
El pintor Paul Gauguin es uno de los máximos representantes del postimpresionismo francés.
Primeros pasos
Paul Gauguin nació en 1848 en París, aunque pasó sus primera años de vida en Perú. Su sentido de la aventura siempre estuvo presente y le llevó a enrolarse en la marina mercante al no haber sido aceptado en la Escuela Naval. Años más tarde empezaría una carrera bastante exitosa como agente de bolsa en París y durante esta época comienza su fascinación por la pintura con sus primeros contactos con los impresionistas y participa en alguna exposición animado por Pisarro.
Su carrera
Al quedarse sin trabajo debido al hundimiento bursátil de 1882, empieza a dedicarse totalmente a la pintura. Frente a las dificultades económicas se muda a las provincias y después a Copenhague (1885), en donde su esposa danesa, con la que tuvo cinco hijos, tenía familia. Después vuelve a París y se muda a Pont-Aven, dónde se reúne un grupo de jóvenes pintores. Allí conoce a Émile Bernard, joven pintor con el que intercambia ideas artísticas. Decide emigrar a Panamá en compañía de su amigo pintor Charles Laval y desde allí viaja a Martinica, en donde pinta los primeros paisaje que manifiestan su estilo característico, pero decepcionado por nuevos fracasos vuelve a París, en donde conoce a los hermanos Van Gogh y Theo se convierte en su representante, lo que le dio cierta estabilidad económica. Durante un tiempo Gauguin y Vincent Van Gogh conviven en Arles pero sus enfrentamientos eran continuos y forzó su regreso a París. En 1889, sufriendo otra vez problemas económicos, organiza junto a Bernard y otros pintores una exposición en el café Volpini de París, que no tiene el éxito esperado. Frustrado, Gauguin decide marcharse a Tahití. Para reunir dinero subasta todas sus obras y, aunque tuvo un éxito moderado, la publicación de las críticas de las obras establecieron la relación entre las ideas de Gauguin y las de los escritores simbólicos, que lo consagraron como líder pictórico del movimiento. Gauguin pasó el resto de su vida en Tahití y en las Islas Marquesas, en donde murió en 1903.
Trayectoria sobresaliente
La trayectoria pictórica de Gauguin empezó en el impresionismo y evolucionó hacia el simbolismo mediante la simplificación de las formas y los colores, creando un lenguaje artístico propio que influyó enormemente en los pintores posteriores. Sus dos temas principales de inspiración fueron la Bretaña francesa y Oceanía, plasmando los diferentes elementos de sus culturas y su folclore. Su obsesión por plasmar las islas desembocó en composiciones complejas en las que cada detalle tiene un significado concreto, como se puede apreciar en El espíritu de la muerte vigila (1892), una de sus obras más representativas.