Plan de igualdad de oportunidades: secretos para implementarlo en la empresa
Los planes de igualdad de oportunidades son una iniciativa de Responsabilidad Social Empresaria que toma cada vez más fuerza en las empresas. Aquí algunas alternativas y secretos para implementarlos.
Planes de igualdad
Los planes de igualdad en el trabajo o de igualdad en oportunidades laborales, son cada vez más frecuentes entre las empresas que buscan otorgar un buen clima laboral y dar una buena imagen a sus públicos de interés. Estos planes implican que, dentro de las políticas de selección de recursos humanos, se tendrán en cuenta perfiles tanto masculinos como femeninos, sin importar la tarea a la que se deba someter el individuo. Si bien esta afirmación puede tener ciertas reservas, lo que se busca es no generar búsquedas de personas basadas en el sexo, la raza, la religión o el color de piel. Las empresas que promulgan políticas de igualdad son potenciales receptoras de subvenciones, premios y créditos para mejorar este tipo de prácticas, mientras que se aboga por la igualdad de la mujer en el trabajo. A su vez, estos planes de igualdad no solo refieren a la igualdad entre mujeres y hombres, sino que además plantean la apertura de las puertas a personas discapacitadas, a personas que se reinsertan en la sociedad luego de problemas de drogas y alcohol, ex presidiarios, etc.
¿Cómo implementarlos?
Las políticas de igualdad entre hombres y mujeres deben ser fuertemente fomentadas por la cúpula directiva de las empresas, e implementada por Recursos Humanos, quien se encargará de hacerla cumplir. Estas políticas tienden a flexibilizar el sistema de búsqueda y selección de personal, por lo que los perfiles pueden ser reestructurados y los descriptivos de tareas puestos al día para mejorar estas políticas. Además, se debe comunicar a toda la planta, especialmente a aquellos que toman las decisiones, el nuevo plan que se está poniendo en marcha, con el fin de obtener el beneplácito y la colaboración de todo el personal. También se deben ofrecer mejoras en la accesibilidad a los puestos de trabajo, para que así las personas con capacidades de movilidad reducida tengan un acceso de mayor facilidad. Por último, se debe capacitar al personal de RRHH en este tipo de prácticas, ya que serán los responsables de este departamento los que aplicarán las normas de igualdad entre hombres y mujeres.