Reunificación de préstamos: ¿Qué es y qué beneficios aporta?
Ante una situación en la que el crédito se restringe considerablemente por parte de la banca, o cuando el monto de nuestras deudas empieza a resultar un agobio, tenemos la opción de renegociar nuestras deudas mediante una reunificación de préstamos. Vamos a ver ¿Qué beneficios aporta esta opción y en qué se basa su funcionamiento?.
Reunificación de préstamos
La reunificación de deudas es un procedimiento por el que renegociamos todos nuestros préstamos para convertirlos en un préstamo único. Este préstamo único, por lo común, es el que pesa sobre nuestra vivienda habitual, aunque es posible que el contrato se verifique también hipotecando cualquier otro inmueble. De este modo, lo que hacemos en realidad es solicitar una ampliación de hipoteca para liquidar los otros préstamos, consiguiendo refinanciar las deudas que tengamos por otros conceptos Por tanto, el requisito más importante para conseguir una reunificación de préstamos es tener una hipoteca. Esto implica, pro supuesto, que el importe de la reunificaciónd e créditos dependerá de una serie de parámetros: - Parte de la hipoteca que tengamos ya pagada. - Tasación del inmueble hipotecado. - Coste que tengamos escriturado para cancelar la hipoteca antigua y abrir una nueva. Si las comisiones son muy elevadas no nos va a valer la pena la operación, por todo lo que perdemos en las comisiones. Por último, a la hora de calcular si conviene o no, hay que sumar los costes escriturales, de notaría, impuestos y demás, que suelen rondar entre el diez y el veinte por ciento del monto de toda la operación.
Los beneficios que aporta
Reunificar los préstamos puede ser muy ventajosa para la refinanciación de nuestras deudas porque convierte deudas a corto plazo (y cuotas altas) en deudas a largo plazo (y , por tanto, cuotas más bajas). Para que salga rentable y sea posible refinanciar una cantidad respetable hay que tener pagada una buena parte de la hipoteca. Otra opción que nos ayudará a salir del agobio es no sólo ampliar la hipoteca, sino renegociar la ampliación del plazo de la hipoteca. Por este sistema, pagaremos más intereses, por supuesto, pero de lo que se trata es de salir de una situación de apuro y bajar las cuotas en un momento dado. No obstante las ventajas, en este tipo de operaciones hay que vigilar muy de cerca las comisiones que cobra el reunificador de deudas y las nuevas condiciones que se pactan en la hipoteca