Tres consejos exclusivos para conseguir préstamos hipotecarios baratos
Obtener un préstamo hipotecario barato no es tarea sencilla. No obstante, si el cliente posee un buen perfíl crediticio tiene a su favor grandes posibilidades de conseguirlo en las mejores condiciones, siempre que maximice adecuadamente sus fortalezas. A continuación se desvelan tres consejos exclusivos para conseguir préstamos hipotecarios baratos.
Buscar y comparar
Encontrar préstamos de bancos baratos implica seguir el mismo procedimiento que con cualquier otro bien o servicio, el de buscar exhaustivamente tanto por Internet como visitando varias oficinas bancarias. No sólo basta, sin embargo, con realizar dichas pesquisas. Es conveniente realizar una especie de tabla comparativa, en la que se refleje no sólo la tasa de interés nominal, sino las comisiones y demás gastos, así como aspectos no monetarios pero que pueden ser de importancia vital para el prestatario, como el plazo de pago, el porcentaje que el banco presta sobre el valor de la tasación o si se requiere de avalista o no para las operaciones hipotecarias. Es conveniente anotar que los llamados bancos virtuales, es decir, aquellos que no tienen oficinas físicas, suelen tener las menores tasas de interés nominal, dado que sus costes operativos son menores. No obstante, también son más estrictos a la hora de evaluar los requisitos para conceder hipotecas baratas.
Negociar con la institución financiera
Aunque parezca inútil al principio, negociar con el banco para tratar de conseguir mejores condiciones es factible. Los gerentes de las oficinas normalmente tienen alguna potestad de otorgar aunque sea pequeñas rebajas, que a la larga resultan importantes. Uno de los mejores instrumentos con el cual se cuenta para dicha negociación es, precisamente, la tabla comparativa a que se ha hecho mención en el apartado anterior, pues denota que el solicitante ha realizado un trabajo concienzudo de recopilación y análisis de información financiera.
Vinculaciones
Uno de los mecanismos más empleados para bajar la tasa de interés en las hipotecas son las llamadas vinculaciones, que consiste en que adicionalmente al préstamo hipotecario se contraten otra serie de servicios o productos del banco o caja de ahorros. Entre los más comunes se encuentran la domiciliación de la nómina o pensión en la cuenta de ahorros, la domiciliación de recibos de servicios públicos (agua, luz, gas, teléfono fijo y móvil, por ejemplo), y la contratación de una tarjeta de crédito. También se incluye la contratación de seguros de hogar y de protección de pagos, y de una cuenta para un fondo de pensiones, por mencionar los más comunes. Cada uno de dichos servicios bonifica en porcentajes diferentes, dependiendo del banco y del perfil del cliente.