Restaurantes en Granada: uno para cada gusto

Granada es la ciudad de la Alhambra, del barrio del Albaicín, de Sierra Nevada y del Parque de las Ciencias. Hacer turismo en Granada es tener al alcance de la mano costas tropicales, alojamiento en casas cueva, rutas por la Alpujarra y, cómo no, una amplia y rica oferta gastronómica.

De tapas por Granada

Ir de tapas y así probar en pequeñas porciones la cocina granadina, acompañando con estos pequeños platos a un vaso de cerveza, refresco o vino es una costumbre de la zona, muy recurrente para cenas o almuerzos entre amigos. Las mejores zonas para practicar esta costumbre que es el tapeo en Granada son el barrio del Albaicín, la calle Elvira y el Campo del Príncipe, zonas llenas de locales en los que se puede seguir una ruta de tapas y probar así gran variedad de platos. Así, en el desplazamiento de un bar a otro, se puede disfrutar del ambiente de la calle, en la que los clientes disfrutan de esta costumbre de salir de tapas, al tiempo que el visitante se impregna del encanto del casco histórico de la ciudad. Incluso en los restaurantes más renombrados se puede disfrutar de las tapas, pues suelen contar con pequeñas barras que las ofrecen como alternativa a sus cómodos salones interiores.

Algunas sugerencias

En la calle Navas se ubican múltiples establecimientos: tanto la Chicotá, que presenta como especialidad los champiñones en vinagre y el revuelto de salmón con tomate natural, como Los Diamantes 1 (Diamantes 2 se ubica en la calle Rosario), especialista en gambas y berenjenas, que cuenta con 20 años de experiencia. En esa misma calle se ubica un local de gran calidad, con platos y tapas al estilo de la abuela: el Mesón de la Abuela, especialistas en fritura de pescado y ensaladas de la abuela. Si el visitante busca una taberna clásica con una de las terrazas con encanto de la ciudad, en la que degustar huevos revueltos, carnes ibéricas y una gran cantidad de tapas, no debe olvidar Los Trastos, en la calle Sarabia. También hay cabida para la cocina de autor, innovadora y creativa. En la calle Rosario, La Pujana ofrece tapas de cocina moderna y una extensa carta de cavas. La Antigua, en la calle Acera del Darro, es especialista en canelones de morcilla y cuentan con una carta de vinos muy completa, que se puede disfrutar entre amigos en una interesante tertulia. Y para culminar esta jornada de tapeo, nada mejor que acudir a una de las múltiples teterías de la zona, para disfrutar de la variada oferta de tés, infusiones y pasteles típicos, rodeados de la decoración más tradicional de la zona. Buen provecho.