¿Cómo aumentar peso con la dieta hipercalórica?
Si se procura un aumento de peso debido a la delgadez, la alimentación imprescindible es una dieta hipercalórica. Las dietas hipercalóricas correctas, además de ser altas en calorías, permiten también lograr aumento de peso, mejorando además la cantidad y la calidad de los alimentos, previniendo los problemas digestivos.
Causas de delgadez
Puede ser propia de la constitución física, cuando una persona presenta bajo peso deben analizarse las causas.
Puede deberse a:
- alimentación deficiente
- pérdida de apetito
- trastornos en la absorción intestinal
- patologías preexistentes
- patologías debilitantes (cáncer o sida)
- actividad física excesiva
- situaciones que provoquen estrés.
Para aumentar el peso, debe tratarse la situación que llevó al adelgazamiento.
Cuando la delgadez es constitucional, una dieta hipercalórica aumenta de tamaño las células grasas, ganando peso.
Las dietas hipercalóricas deben considerar la sensación de plenitud, y no generar con los alimentos una gran sensación de saciedad.
Las grasas brindan esa sensación, entonces no debe exagerarse su uso para aumentar las calorías.
Dietas hiperproteicas: no usarlas exageradamente, pueden generar colesterol y sobrecarga a nivel renal y hepático.
Carbohidratos: más convenientes para aumentar el aporte hipercalórico.
Toda dieta para aumentar de peso debe lograr un aporte calórico entre 20 y 50% superior al normal.
Una dieta normal aporta 2.000 calorías, una hipercalórica debe alcanzar 3.000 calorías aproximadamente.
Se debe aumentar gradualmente dependiendo de las necesidades personales respecto a su edad, sexo y patología (si hubiese).
Dieta hipercalórica: características
Las calorías deben aumentarse con cantidad y calidad de alimentos ingeridos
No saltarse las comidas principales: desayuno, almuerzo y cena. Agregar meriendas entre comidas.
Proteínas: 1 y 1,5 gramos por kilo de peso (permite cubrir necesidades proteicas previas).
Vitaminas sobre todo del complejo B.
Alimentos ricos en fibra, deben consumirse moderadamente.
Alimentos que aportan calorías con poco volumen, (frutos secos, aceites, azúcares, miel y mantequilla).
No comer al inicio de las comidas ensaladas y sopas: disminuyen el apetito hacia platos posteriores.
Los alimentos deben ser fácilmente digeribles. Las grasas y las proteínas tardan más en digerirse.
Grasas crudas: mejor digestión si las sometemos a cocción.
Suplementos dietéticos: bebidas o productos hipercalóricos de fórmula para enriquecer las comidas.
Lácteos: preferiblemente incluir los enteros. El yogur debe enriquecerse, con miel o frutos secos.
Quesos: gran aporte de proteínas de alto valor biológico y de calorías.
Huevos: pueden consumirse sin inconvenientes. Aportan grasas, proteínas y enriquecen las preparaciones.
Carnes: se recomienda consumir las blancas, porque son de fácil digestión.
Vegetales y frutas: consumirlas cocidas: disminuyen su volumen y valor de saciedad.
Pastas, arroces, cereales y patatas: consumirlos diariamente en las comidas principales (almuerzo y cena).
Azúcares y dulces: consumir sin inconvenientes, pero sin exageración.
Infusiones: prepararlas en la propia leche.
Bebidas sin gas: no generan efecto saciante.
Frutos secos y frutas desecadas: agregan calorías y nutrientes en la dieta.
Consumir pan diariamente, preferentemente blando, para que no provoque saciedad.
Temperatura de los alimentos: no deben ser altas: mas caliente, más poder saciante.
Si se procura lograr aumento de peso corporal, gradual y saludable, deben seguirse las pautas descriptas.