Soportes publicitarios: tres buenas recomendaciones

Los paneles exteriores de las cabinas telefónicas, las performances más vivas en lugares públicos o las camisetas luminosas publicitarias constituyen tres fórmulas de marketing muy distintas entre sí, que, en cualquier caso, tienen un punto en común, toman la calle de manera original para trasladar a los anunciantes las sugerencias de sus mensajes.

El mensaje se va de calle

Un soporte publicitario con el valor de la ubicuidad es el de los paneles exteriores de las cabinas de teléfonos públicas. Se trata de dos superficies de diseño cuadrado o rectangular, más o menos ancho o estrecho, que se coloca a ambos lados del espacio de locución de la instalación. El soporte publicitario es muy visible, tiene la ventaja de que su diseño ancho, protege la privacidad de la zona de locución del punto telefónico, al tiempo que mejora el aislamiento y las condiciones de insonorización de un equipo abierto y situado en un lugar público en el que el ruido suele ser frecuente. Configuraciones El soporte es un stand modular que permite todo tipo de configuraciones de publicidad estática, y aún las de paneles luminosos, que se pueden conectar al sistema eléctrico de la propia cabina. Por último, la instalación es fácil y aprovecha de forma escalable la red de cabinas publicas de todo el país, situadas en puntos céntricos de las poblaciones. Un soporte publicitario alternativo y original es el vinculado a las escenificaciones en lugares también públicos, performances. Puestas en escena que buscan atraer las miradas y el interés de los paseantes y potenciales consumidores de los productos o servicios anunciados.

Publicidad amable y cercana

Se trata de profesionales de la interpretación, de la música más popular, de la animación que visten con entretenimiento los mensajes publicitarios en espacios abiertos o cerrados como centros comerciales, plazas públicas y todo tipo de eventos. Su ventaja es la aparente espontaneidad del formato, su positividad social, la posibilidad de dirigir la acción publicitaria a un público objetivo, y, en su caso, su interactividad. Una publicidad tan amable como cercana. Un tercer soporte para publicidad es todavía más original e interactivo. Consiste en utilizar a personas como soportes del marketing del modo en que lo hacían tiempo atrás los llamados hombres anuncios, pero aprovechando el recurso de la tecnología de iluminación led. El objetivo es vestir a ciudadanos elegidos por su capacidad de comunicación, dinamismo y movilidad para portar camisetas con anuncios luminosos en formato led. Para pasearlas y a sus mensajes publicitarios en su entorno habitual. Lo mejor de esta propuesta es que los contenidos se pasean dentro del entorno laboral, personal o familiar del portante. El mensaje se va de calle.